Domingo 4 de Mayo de 2025, día 3.

No he tenido incidencias o visitas inesperadas, así que he descansado muy bien, después de la infernal noche en el barco. Cuando estoy en un sitio un poco desprotegido, no le pongo el doble techo la tienda, así puedo ver bien mi alrededor. Qué bien se duerme en mi saco, ha hecho bastante frío, menos mal que vengo preparado. Me despierto sobre las 6 y me quedo un rato esperando a que salga el Sol y que se caliente un poco la escena.

En seguida me pongo en marcha y me hago el desayuno, que me encanta. Llevo café, leche, pan, aceite, mermelada... no me falta de nada :)

Una vez recogido todo y repasado que no me olvido cosas, estoy listo para salir. Aquí no ha pasado nada.

Hoy me dirijo al famoso Col de Belkassem, que ya conozco, así que voy confiado.

Las vistas desde arriba son muy largas.

Lo hago rápidamente y sin problema, la motillo va de maravilla y este terreno es perfecto para la 450. Una vez lo bajo, tengo un recorte por un tramo que han marcado los de Enduroaventura, al que llaman "Collado Bonji", y que atraviesa y recorta para salir directo a Boudenib.

Tengo que subir a ese altiplano, pasar por el y luego bajar por el otro lado.

Es un tramillo de enduro, que me encanta.

En seguida estoy metido en tremendo pedregal.

Hay muchos escalones, pero se suben súper bien porque la piedra es muy adhesiva y la moto agarra perfectamente, aunque vaya cargado.

Piedras y más piedras.

Las escaleras se van subiendo estupendamente.

Me resulta divertido y fácil... voy adelantando por los escalones, me lo estoy pasando muy bien. La moto va de maravilla.

Una vez llego a lo alto, las vistas son espectaculares, mucho mejor que desde el collado anterior.

Atravieso todo el altiplano; es lento pero sin complicación ninguna. Y en el otro lado, antes de empezar a descender, hago una parada para descansar y mirar.

Es muy bonito esto, sería un sitio perfecto para poner la tienda. Quizás en otra ocasión.

La bajada es bastante más complicada que la subida, porque está toda destrozada por el agua y hay enormes zanjas donde te puedes caer. Las vistas son increíbles, de las que uno nunca se cansa.

Desde abajo se ve por donde he ido pasando; apenas hay camino y la pendiente es bastante fuerte.

Y una vez abajo, hay que hacer un pequeño tramo salvaje por una rambla -menos mal que está seca- y que me resultó bastante complicada, toda llena de grandes pedrolos. No hay fotos porque no podía parar, he tenido que ir todo el rato aprovechando inercias. Además la salida está cortada por una cerca de una finca de olivos, y hay que atravesar por un pedregal, pero vamos esto ya sin problema. A las 11:36 llego al Camping Rekkam, que conozco a Khajida (la persona que está allí), y quiero saludar a ver si hago amigos.

Aprovecho para pedir algo de comer y me ponen una riquísima ensalada de aguacate y tomate que me sienta de maravilla, está buenísima. Luego me aseo un poco, me pido un café, descanso un ratillo... etc.

A las 13:00 continúo mi viaje. Voy a la "pista Citroën" que ya la conozco, y es fácil. Además tiene una zona de dunas bastante divertida de hacer. Aunque aprieta bastante el calor y la arena está muy blandurria.

Al lado de las dunas hay varios puestos de vending de fósiles.

Más adelante hay un pozo y al pasarlo, cambio de rumbo para dirigirme a la "cascada de piedras".

Llego a la cascada a las 14:46 por una pista relativamente fácil. Es un tremendo agujero, hay que tener muchísimo cuidado de no caerse. El terreno se ve frágil y no me acerco mucho a los bordes por si acaso...

Allí me encuentro con tres personas que van en motos de esas de 300 kilos... tremendo, yo no sé como han llegado hasta allí, tiene un mérito bestial llegar con semejantes mastodontes. Yo voy un poco atacado por la emoción que da la moto. Me piden herramientas, pero las que yo llevo son apropiadas para mi moto, no para las suyas... y nos les puedo ayudar, en cualquier caso no es grave lo que tienen. Me despido rápidamente y me marcho en seguida porque hace un calor terrible y necesito que me de el aire y a la moto también, claro.

En un ratito llego al Oasis de Talrhemt y me encuentro a tres franceses descansando, van en sentido contrario al mío. Charlamos un rato y les comento sobre los otros tres que he visto con las motoso gordas... yo creo que que les queda todo el día, incluso no sé si podrán pasar... hay muchas piedras, barros, agujeros... con motos tan grandes... ufff

Y luego solo un poco más adelante llego al palmeral de Safsaf. Había pensado dormir aquí, pero son solo las 15:33 y tengo todo el día por delante. No obstante me paro a descansar un rato, pero no me encuentro del todo a gusto porque huele a charca. Además hay un par de coches de turistas como yo, y también me salen dos marroqiís a saludar, muy simpáticos, pero es que a mi me gusta estar solo a mi rollo.

Así que sigo adelante. A eso de las 17:00 ya estoy cerca del final del track; tengo bastante calor, me ha agarrado y no me gusta eso, puede ser peligroso. Además me toca atravesar un cordón de dunas que, aunque no es nada del otro mundo, con tanto calor que tengo encima, no quisiera atrancarme...

Parece más de lo que es, pero no es tan complicado... impresiona verlo y pensar que tienes que pasar con la arena tan blanda...

Doy alguna vuelta para buscar donde dormir y por fin encuentro un árbol que tiene bastante protección, ya que hace un calor infernal y mucho viento. Me meto dentro y me preparo todo como siempre con mucho primor, son las 17:30.

Estoy a unos 20 km de Risani, en el banco de dunas; es muy bonito y estoy muy bien escondido.

El campamento me queda siempre muy collejo.

Me meto dentro de la tienda un rato a ver si se me pasa el calor... pero no se pasa. Entonces lo que hago es colgar la bolsa de agua de una rama y me doy una mini ducha porque tengo que enfriarme... y me sienta bastante bien. Me meto otra vez en la tienda para que no me coman los mosquitos, y esperar un poco a que baje el calor. A las 20:30, que ya ha refrescado un poco, me saco la cena, que también llevo desde España, de macarrones con boloñesa... me encantan. También tengo queso y almendras.

Y después de cenar me doy un paseo por la arena, viendo caer el Sol, que esto es muy bonito.

A dormir.